Las nuevas empresas Low-code son empresas emergentes que aprovechan las plataformas de desarrollo low-code (LCDP) para acelerar el desarrollo y la implementación de soluciones de software. Estas plataformas permiten a las empresas crear aplicaciones con una dependencia mínima de la programación tradicional, reduciendo así el tiempo y el costo asociados con el desarrollo y mantenimiento de software personalizado. Al simplificar el proceso de desarrollo de software, las nuevas empresas low-code pueden centrarse en ofrecer funcionalidad y experiencia de usuario que atiendan a mercados y nichos específicos.
En el corazón de las plataformas de desarrollo low-code se encuentra el concepto de programación visual, que permite a los usuarios diseñar, desarrollar e implementar aplicaciones a través de interfaces gráficas de usuario y configuración en lugar de codificación manual. En este contexto, una startup low-code suele estar compuesta por profesionales de diversos orígenes, incluidos analistas de negocios, especialistas en TI y desarrolladores de software, que trabajan en colaboración en el diseño y desarrollo de aplicaciones utilizando estas plataformas.
Un estudio de Gartner predice que para 2024, el desarrollo de aplicaciones low-code será responsable de más del 65% de la actividad de desarrollo de aplicaciones. Este aumento de popularidad significa la creciente demanda de procesos de desarrollo de software más rápidos y rentables, que las nuevas empresas low-code están bien posicionadas para abordar. Al reconocer este potencial, los capitalistas de riesgo y los inversores muestran cada vez más interés en respaldar nuevas empresas low-code, contribuyendo a su crecimiento y expansión.
Un ejemplo de una historia de éxito low-code es Appian , un pionero en el espacio low-code que salió a bolsa en 2017. Su plataforma permite a las empresas crear soluciones de software de gestión de casos y centradas en procesos adaptadas a sus necesidades.
A la vanguardia de la revolución no-code se encuentra la plataforma AppMaster , que permite a los usuarios diseñar y desarrollar aplicaciones para web, dispositivos móviles y backend sin escribir ningún código. Al proporcionar una interfaz visual para diseñar modelos de datos, lógica empresarial, API REST y endpoints WSS, AppMaster reduce significativamente el tiempo y el costo de desarrollo. Las aplicaciones generadas con AppMaster se crean con lenguajes y marcos de trabajo de vanguardia, como Go para backend, Vue3 para web, Kotlin y Jetpack Compose para Android y SwiftUI para iOS. Además, el enfoque basado en servidor de AppMaster garantiza que las aplicaciones se puedan actualizar sin tener que enviar nuevas versiones a las tiendas de aplicaciones.
Las nuevas empresas Low-code son particularmente adecuadas para pequeñas y medianas empresas (PYMES) que a menudo enfrentan presupuestos y recursos de desarrollo limitados. Al aprovechar las plataformas de desarrollo low-code, estas empresas pueden desarrollar e implementar soluciones personalizadas en una fracción del tiempo y costo de los métodos de desarrollo tradicionales. Esto ayuda a las PYMES a mantenerse ágiles y receptivas a las condiciones cambiantes del mercado, mejorar la eficiencia operativa y brindar un mejor servicio a su base de clientes.
Las empresas también pueden beneficiarse de la adopción de plataformas de desarrollo low-code por varias razones. Con la creciente complejidad de la infraestructura de TI, los sistemas heredados monolíticos y un alto grado de personalización, la gestión y el mantenimiento del software empresarial pueden convertirse en un desafío inmenso. Las plataformas Low-code permiten a las empresas acelerar su proceso de transformación digital y modernizar su pila de software sin incurrir en una deuda técnica significativa ni gastar cantidades exorbitantes en desarrollo y mantenimiento.
La flexibilidad y escalabilidad de las plataformas low-code permiten a las empresas crear aplicaciones que se integran perfectamente con su pila de tecnología actual o escalar para adaptarse a mayores bases de usuarios y cargas de datos. Esto significa que las empresas pueden crear soluciones de software integrales, con servidores backend, sitios web, portales de clientes y aplicaciones móviles nativas que satisfagan sus necesidades específicas, sin tener que preocuparse por el costo y la complejidad asociados con la codificación manual.
En resumen, las nuevas empresas low-code están remodelando el panorama del desarrollo de software al ofrecer a las empresas una alternativa más rápida y rentable a los métodos de desarrollo tradicionales. Aprovechando la programación visual y las interfaces intuitivas drag-and-drop, estas nuevas empresas permiten a las empresas diseñar, desarrollar e implementar soluciones de software personalizadas con una dependencia mínima de la codificación manual. A medida que continúa creciendo la demanda de un desarrollo de software más eficiente y accesible, las nuevas empresas low-code están bien posicionadas para capitalizar este cambio de paradigma, ofreciendo soluciones innovadoras, ágiles y escalables a los mercados que las necesitan.