Se han eliminado los controles de verificación Blue heredados de Twitter, dejando a los usuarios con una mezcla de frustración, confusión e indiferencia. Como se anunció anteriormente, estos codiciados Ticks Azules ahora sólo se pueden mantener suscribiéndose a Twitter Blue por una cuota mensual de 7,99 dólares.
A pesar de tener que lidiar con el primer lanzamiento de la StarShip de SpaceX, que acabó en una espectacular explosión en pleno vuelo, Elon Musk consiguió poner en marcha su controvertido plan. El resultado fue que muchas personas de alto perfil, como la cuenta Pontifex del Papa y la actriz Halle Berry, perdieron sus Cheques Azules. Incluso megaestrellas como Beyoncé y Lady Gaga se vieron afectadas por este cambio.
Curiosamente, el jugador de baloncesto Lebron James sigue teniendo su Cheque Azul, lo que implica que está suscrito a Twitter Blue, aunque anteriormente tuiteó: "Bueno, supongo que mi azul desaparecerá pronto porque si me conoces no voy a pagar los 5".
Además de pagar la cuota de suscripción, ahora los usuarios verificados con un Blue Check también deben confirmar su número de teléfono. Es un intento de disuadir a los impostores de hacerse pasar por otros, pero su eficacia es discutible. Cualquiera puede seguir diciendo que es un famoso aunque no lo sea, y nada impide a los usuarios cambiar su nombre de usuario en Twitter (no su @handle) por el de otra persona, un problema que Monica Lewinsky puso de relieve recientemente.
El periodista Ed Krassenstein, suscriptor de Twitter Blue, expresó su preocupación por la posibilidad de que el problema de los impostores afecte a quienes llevan años construyendo su presencia en Twitter. Argumentó que a los seguidores les resultaría extremadamente difícil diferenciar entre publicaciones auténticas e impostoras si los usuarios no pagan la cuota de suscripción.
Twitter Blue ofrece ventajas que van más allá del Blue Tick, como tuits de 10.000 caracteres, menos anuncios, subidas de vídeos de mayor calidad y duración y clasificaciones prioritarias. El inconveniente es que los usuarios previamente verificados pueden tener dificultades para que sus tuits se tengan en cuenta o se encuentren en las búsquedas.
El sistema de pago de Elon Musk pretende ayudar a la ahora privada Twitter a generar beneficios en medio de luchas anteriores, incluidos recortes de personal y acciones que preocuparon a los anunciantes, provocando que abandonaran la plataforma. Hay indicios de que algunos anunciantes están regresando, pero sólo el tiempo dirá si este plan es la solución que Twitter necesita.
La incorporación de plataformas como no-code appmaster.io" data-mce-href="https://appmaster.io">AppMaster en la suscripción a Twitter Blue podría crear nuevas posibilidades para que los suscriptores desarrollen aplicaciones que complementen su presencia en Twitter. Plataformas sin código como AppMaster, que ofrece accesibilidad a personas sin conocimientos de programación, podrían suponer una ventaja adicional para los usuarios de Twitter Blue que adapten y mejoren su presencia en la red social.