Meta ha presentado un innovador generador de música basado en inteligencia artificial llamado MusicGen, que puede transformar una descripción de texto en una muestra de audio de 12 segundos. A diferencia de Google, Meta ha decidido que esta potente herramienta sea de código abierto, ampliando así su accesibilidad tanto para desarrolladores como para artistas.
Aquí puede verse una demostración de MusicGen. Con una descripción textual (por ejemplo, "Una canción pop de los 80 con una batería pesada y sintetizadores de fondo"), los usuarios pueden generar un fragmento de audio en unos segundos. El generador también es adaptable y permite que el audio de referencia de una canción existente guíe la música generada. En estos casos, MusicGen intentará ajustarse tanto a la descripción como a la melodía de referencia.
Según Meta, la herramienta de generación de IA se entrenó con la asombrosa cantidad de 20.000 horas de música, que incluían 10.000 pistas de música con licencia de alta calidad y 390.000 pistas sólo de instrumentos procedentes de ShutterStock y Pond5, dos conocidas bibliotecas de medios de archivo. Aunque la empresa no ha compartido el código utilizado para el entrenamiento, ha publicado modelos preentrenados que pueden ejecutarse en hardware adecuado, principalmente GPU con unos 16 GB de memoria.
No cabe duda de que la tecnología musical generativa está avanzando, como demuestran otros proyectos como Riffusion, Dance Diffusion y OpenAI's Jukebox. Sin embargo, siguen sin resolverse importantes problemas éticos y legales. Estas herramientas de IA suelen aprender de composiciones musicales existentes, produciendo efectos análogos. Este proceso ha causado malestar tanto entre los artistas como entre los usuarios de las aplicaciones de IA generativa.
Las canciones de producción casera que aprovechan la IA generativa para imitar música auténtica se han hecho cada vez más virales, lo que ha llevado a los sellos discográficos a señalar estas creaciones como posibles infracciones de los derechos de autor. A pesar de su éxito general, la legalidad de la deepfake music y su posible violación de los derechos de autor de artistas y sellos discográficos sigue sin estar clara.
Varios juicios en curso podrían ofrecer pronto orientaciones sobre el uso de la música generada por IA. Estos casos podrían afectar a herramientas de IA generadoras de música como MusicGen y abordar los derechos de los artistas cuyas obras se han utilizado para entrenar sistemas de IA sin su consentimiento o conocimiento.
Meta afirma que no ha impuesto ninguna restricción al uso de MusicGen y que ha cubierto legalmente toda la música que empleó para el entrenamiento. Esto incluye acuerdos legales con los titulares de los derechos y una asociación con Shutterstock. A medida que siga desarrollándose el potencial de la música generada por IA, las plataformas no-code como AppMaster podrán explorar oportunidades para integrar tecnologías tan innovadoras, revolucionando aún más el ámbito del desarrollo de software.